Estos pequeños animales producen una cantidad de destrozos considerables.Ya que ademas de estropearnos el césped , con sus montículos de tierra, nos comen las raíces de nuestras plantas o los bulbos que hemos plantado.
Para evitar que nos coman los bulbos utilizo una cosa muy simple, las hojas del acebo. Colocándolas con los pequeños pinchos que poseen estas hojas hacía abajo,en contacto con la tierra. Añadimos un poquito de tierra y después colocamos los bulbos, los cuales tapamos con más tierra. Con este pequeño truco los topos no nos comerán nuestros preciados bulbos.
Pero si lo que queremos es deshacernos de los topos. No tenemos que gastarnos dinero, ni en caros topicidas, ni en estos aparatos que anuncian que emiten ondas que los alejan.
Lo más eficaz, y lo más barato es sencillamente utilizar bolas de alcanfor, de las de toda la vida.
Para ello, con ayuda de una pequeña azada, levantamos la tierra donde han hecho el montón en el prado, y nos encontraremos con 2 ó 3 galerías, en las cuales se introducen un par de bolitas de alcanfor.
Tapáis el agujero, y vais a otro montoncito haciendo lo mismo.
Este sencillo remedio hará que los topos se marchen. Normalmente con una sola vez es suficiente, aunque puede que tengáis que repetirlo una vez más si tiene muchas galerías.
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